Hace unos meses me encontré la noticia de que unos médicos en China habían instalado unos electrodos en el cerebro de un paciente con el objetivo de tratar su adicción a las metanfetaminas. Por lo visto, aunque sería quizás más preciso decir, leído, lo que han hecho ha sido instalar dos electrodos con el objeto de estimular ciertas áreas del tronco del encéfalo y del núcleo Acumbens, y así controlar el modo como se segrega la dopamina y así poder decir cuáles serán las emociones que sentirá el paciente. De hecho, es mediante el uso de una tableta, como los médicos controlan el estado emocional de la persona, pudiendo así cambiar la asociación del placer y el dolor en relación a los efectos de la metanfetamina, o incluso de adicciones como el juego. Sigue leyendo